Voces
El tiempo nos agota, nos resbala, nos inunda de sueños de agua y cristal pero también nos quema. Ante el silencio, impuesto por la intolerancia, solo nos queda un grito infinito que rasgue las paredes de este mundo obsceno e insensible a la barbarie.
¿Se perderán una vez más las voces airadas entre las nubes de pólvora?
El Grito. Edvard MunchRos.